Desde hace varios años es una de las personas más populares de Córdoba. Desde su llegada como presidente de Belgrano, ganó espacios en el corazón de la gente y consiguió logros deportivos e institucionales en el club de Alberdi que le valieron el reconocimiento general. En 2012, después de que el equipo se quedara en Primera tras una gran campaña, anunció la compra del predio del club y donó todas las obras que hay en Villa Esquiú, lugar que enorgullece a todos los piratas y que es la envidia de otros clubes. Un cordobés por adopción que apostó por el club de sus amores para hacerlo de Primera y lo consiguió en todos los niveles. Remarca la importancia de los valores humanos que deberían ser el leivmotiv en toda sociedad: "Una vez les dije a los jugadores que el egoísmo hace perder un principio de equipo y de esfuerzo. Cambiaron y a partir de allí empezamos a funcionar de otra forma: creciendo".
Es un laburador, motivador, que vamos ha estar agradecidos siempre, y vamos a poder contar de por vida la vuelta de timon que dio este tipo..... y aprender que con trabajo,humildad y orden viene solo el progreso